Ayer, 23F de 2013, pudimos ver el verdadero estado de la nación, en las calles de este país. Miles de ciudadanos se manifestaron sin incidentes en más de 80 ciudades reclamando el reconocimiento de una estafa realizada por los mercados, con la connivencia del los dos principales partidos políticos del país. Deuda ilegítima, no debemos, no pagamos. Y una verdadera democracia,
«Democracia es una forma de organización social que atribuye la titularidad del poder al conjunto de la sociedad.»
El conjunto de la sociedad pide a nuestros representantes en el Congreso que nos escuchen y nos dejen de engañar. No nos creemos vuestras palabras. La oratoria escuchada en ese otro «debate» del ring del Congreso, no nos convence. Los representantes de PP y PSOE se alternaban en explicaciones y peticiones baldías, en un espectáculo más propio de una patética pelea amañada de Pressing Catch, donde cada jugador es aplaudido complacientemente por su público. Pero que poco tiene que ver con el verdadero estado de la nación
¡Enhorabuena a todos los que estuvisteis en las distintas manifestaciones de todo el país! Los verdaderos ganadores del debate sobre el estado de la nación.
Nosotros tenemos el poder, no nos dejemos engañar y desinformar por algunos medios de comunicación. Nosotros estamos por la democracia y manifestarnos es solo una de las acciones que comenzamos a hacer para demostrar nuestro poder… pero hay otras muchas acciones en las que también podemos hacer valer nuestro poder y tenemos que seguir por ahí.
Créanme, si no lo hacemos, tengan la seguridad que España y los españoles estaremos muchísimo peor… las previsiones para el 2013 y 2014 no son NADA favorables: a pesar de que Mariano Rajoy anuncia un déficit público del 7%, la Comisión Europea lo evalúa en un 10,2% después del 8,9% de 2011, muy lejos del fijado por el gobierno en el 6,3%. La diferencia estriba en que para el cálculo, el gobierno no ha tenido en cuenta la ayuda internacional a la Banca de 40 millones de dólares.
La reforma del artículo 135 de la Constitución española, sin consulta alguna a la ciudadanía, supedita todos los recursos del Estado al pago de esta deuda ilegítima a costa de recortar todos los servicios públicos y de subastar a precio de saldo el patrimonio del Estado. Esta reforma supuso un “golpe de estado financiero”, primando el pago de los intereses frente a las obligaciones propias de un Estado Social y de Derecho.
Pero no quiero olvidarme de los bomberos de Galicia que fueron llamados para desalojar a una anciana de más de 85 años de su casa. Recordemos que la quieren desahuciar de su casa por demorarse en el pago, no por no pagar. Estos bomberos, recordaron que están para ayudar a la gente y no para echarla de sus casas, para eso están los políticos y los banqueros. Cogieron el cartel de «stop desahucios» y lo colocaron en el propio camión.
Pero no son los jueces los únicos valientes, muchas personas anónimas cansadas de la situación, se han decidido a denunciar situaciones irregulares, a publicar desmanes realizados con dinero público, a rechazar intervenir en desahucios. Miles de personas anónimas crean asociaciones, grupos, redes de trabajo para cambiar el sistema desde abajo. Mareas de ciudadanos salen a la calle a defender en nombre de todos la sanidad, y la educación pública, así como los derechos sociales.
En estos últimos días del año llenos de buenos deseos, os deseamos especialmente ¡SALUD!. Puede sonar a frase hecha, pero en esta ocasión no es ningún formalismo. Cualquiera que haya tenido cerca una enfermedad, sabe de lo que estoy hablando. Y en estos momentos difíciles, no puedo dejar de agradecer la profesionalidad, el cariño y la dedicación de todos los trabajadores de la sanidad que hemos tenido cerca durante este año. Se me hace especialmente presente el orgullo que sentía por el sistema sanitario público que hemos construido entre todos y cómo no hubiéramos podido acceder a esos caros tratamientos si ésta no hubiera sido así: sanidad pública, universal y gratuita, como aboga la Constitución en su artículo 43.
Kokotaraino 